Han pasado más de siete años desde
aquella noche del 19 de febrero de 2005 en la que el Athletic,
demostrando no tener complejos, saliendo a ganar y plantando cara a un
equipo que, aunque venciera en estrellas, no superaba a los rojiblancos
en garra y sentimiento, consiguió su última gesta en el Santiago
Bernabéu, templo del Real Madrid.
En las últimas temporadas, las horas
previas al partido de la capital tienen cierto aroma a derrota
anticipada, algo normal atentiendo a la calidad futbolística del rival,
pero que no siempre fue así. Sin ir más lejos, en las dos campañas que
Ernesto Valverde fue técnico del Athletic Club, los
rojiblancos se convirtieron en un martillo para el Madrid, al que
derrotaron en tres de los cuatro enfrentamientos ligueros.
Dos de esos cuatro partidos se
disputaron en el campo del Real Madrid. La primera visita dejó una
sensación amarga, pues los bilbaínos merecieron mucho más, pero
perdieron 3-0 a pesar de generar infinidad de ocasiones. Casillas y la
falta de puntería de los leones impidieron llevarse los tres puntos.
Samuel sujeta a Yeste Foto: Athletic Club
La segunda vez que
Txingurri pisó territorio blanco la historia fue distinta. De nuevo,
planteó una propuesta futbolística ofensiva y trató al Real Madrid de tú
a tú. Esta vez la noche sería inolvidable, ya que dio como resultado la
última victoria rojiblanca en el Bernabéu.
Daban las ocho de la
tarde del 19 de febrero de 2005 cuando los jugadores del Athletic y del
Real Madrid saltaron al campo del nuevo Chamartín. Los vizcaínos
llegaban con la moral por las nubes tras 10 jornadas consecutivas sin
conocer la derrota en liga y con un recorrido en la Copa de UEFA exitoso
hasta el momento. A pesar de ello, Vanderlei Luxemburgo, entonces
técnico blanco, subestimó al equipo rojiblanco y sentó en el banquillo a
Raúl, Ronaldo y Zidane, pensando en el partido de Champions contra la
Juventus. El once del Athletic estaba formado por Aranzubia, Iraola, Prieto, Murillo, Del Horno, Tiko, Orbaiz, Gurpegui, Yeste, Ezquerro y Etxeberria.
El Athletic salió con confianza desde el
minuto uno. No se dejó amedrentar por el estadio ni por los nombres que
formaban la plantilla blanca e hizo que el Real Madrid viviese su
primera derrota desde la llegada, hacía siete partidos, de Luxemburgo.
Los rojiblancos, como David, unieron
ganas, fuerza, garra y disciplina para vencer a Goliat. No fue fácil,
los leones mostraron algunas dudas en defensa en el primer tramo de
partido, pero a pesar de ello, fueron mejores desde el minuto uno.
Mediada la primera parte, Orbaiz, con un disparo excelente, marcó un
golazo desde el centro del campo que entró claramente en la portería
blanca tras rebotar en el larguero, pero que Moreno Delgado, el
colegiado aquella noche, no alcanzó a ver por la violencia del golpeo.
Del Horno marca de cabeza el 0-1. Foto: Athletic club
En la segunda mitad el técnico blanco
reconoció su error y sacó toda su artillería, pero los visitantes se
mantuvieron firmes y no se amedrentaron. Solo faltaba el gol. Iraola lo
tuvo en sus botas con una jugada brillante en el minuto 49, pero Iker
Casillas, pesadilla el año anterior, se anticipó y atrapó la vaselina.
Nada pudo hacer sin embargo pocos minutos después, cuando Asier del
Horno inauguró el marcador al rematar un centro de Orbaiz. Tras el gol,
el Real Madrid despertó, parecía difícil que el equipo 'merengue'
terminase un partido sin marcar, pero se encontraron con Aranzubia,
quien brilló al detener un mano a mano con Figo y otro con Bekcham. En
el minuto 73, Iraola, con sangre fría, se frenó en seco y remató por lo
bajo ante la precipitada salida de Casillas un pase en profundidad de
Ezquerro, poniendo así el 0-2 definitivo en el marcador.
La imagen que se vio al terminar el
encuentro deja claro lo complicado, duro y a la vez especial que fue
conseguir esa victoria. El sincero abrazo de Aranzubia y Ezquerro sobre
el césped del Santiago Bernabéu mientras sus compañeros saludaban a la
afición que se había desplazado a Madrid, se grabó para siempre en la
memoria de muchos aficionados rojiblancos.
David venció a Goliat
A pesar de la buena racha del equipo de
Valverde, nadie apostaba por la victoria rojiblanca, pues el Bernabéu no
es un campo favorable para los leones. En toda la historia del Athletic
Club, solo 13 visitas al Bernabéu se cuentan por victorias, 6 de ellas
conseguidas antes de los años 50. Muchos aficionados rojiblancos todavía
recordarán la estrepitosa derrota por 7-1 en la temporada 80/81 con
Senekowitch en el banquillo. En lo que llevamos de siglo el club de
Ibaigane acumula 37 goles recibidos por tan sólo 11 a favor, cuatro expulsados y cuatro penaltis en contra.
Aquella mágica noche de 2005, el
Athletic dejó claro que es un equipo muy a tener en cuenta en cualquier
escenario. Las estrellas blancas se apagaron con el sentimiento
rojiblanco. Beckham, Zidane, Ronaldo y compañía no pudieron hacer nada
ante la garra de Iraola, Yeste o Del Horno. El partido del próximo
sábado brinda a los leones una nueva oportunidad de brillar en el
Bernabéu y de demostrar a la afición que vuelven a ser el Athletic de la
temporada pasada. Hace 7 años se consiguió la gesta, puede volver a
repetirse en el 2012.
Distintos nombres, misma rivalidad
Han pasado siete años y la plantilla del Athletic Club se ha renovado por completo. Sólo Iraola y Gurpegui
vivieron esa maravillosa noche en el terreno de juego, ya que aquel día
un jovencísimo Fernando Llorente disfrutó del encuentro desde el
banquillo. Iraizoz, Muniain, Aduriz y compañía intentarán el sábado
conseguir lo que ya hicieron Aranzubia, Yeste, Ezquerro o Del Horno hace
ya siete años. De los 14 jugadores del Real Madrid galáctico que
jugaron aquella noche, solo Casillas permanece en el equipo. El sábado
se enfrentarán nombres diferentes a los que se vieron las caras aquel 19
de febrero, pero la rivalidad, por mucho que pasen los años y cambien
los protagonistas, seguirá siendo la misma.
http://www.vavel.com/es/futbol/athleticdebilbao/197001-siete-anos-son-demasiados.html
